Un ejercicio de memoria: Coincidiendo con la vuelta al gobierno de la autonomía catalana del nacionalismo expreso y secesionista, el expresidente del Palau de la Música de Barcelona D. Félix Millet declaraba como imputado ante el Juzgado de Instrucción nº 30 de esa ciudad. Pese a que tanto él como su mano derecha, D. Jordi Montull, se acogieron inicialmente a su derecho constitucional a no declarar, Millet quiso justificar que la boda de su hija la pagara el Palau porque se trataba de un acto promocional de la institución al que asistieron numerosos invitados “oficiales”. De esa forma explicó ante Su Señoría que, tras las obras de restauración realizadas, la boda de su hija, atraería a los medios y la atención del público, lo que sería beneficioso para el Palau y, por lo tanto, su sufragio por la institución resultaba de lo más lógico.
Así son las maneras de la vieja escuela.
Los dos saqueadores confesos estaban citados para declarar por segunda vez por el desvío de más de treinta y cinco millones de euros de la institución que Millet encabezaba y tratar de desvelar las numerosas incógnitas sobre todos los documentos que aparecieron desde que declararan por vez primera, hacía entonces poco más de un año. Tanto la Fiscalía como el Consorci del Palau pidieron al Juez que instruía el caso, Ilmo. Sr. D. Julio Solaz, que separara la instrucción de estos hechos de la relativa a los presuntos pagos irregulares a Convergencia Democrática de Catalunya (CDC) a través de la Fundació relacionados con la adjudicación de las obras a la constructora FERROVIAL. Hasta entonces, ambas causas se tramitaban conjuntamente por razones de conexidad entre sus protagonistas.
El asunto se saldó finalmente en sentencia de Mayo de 2.014 con la imposición de las penas mínimas: Un año de prisión, y sanción económica.
Es la old school del puyolismo en el amanecer dorado del independentismo declarado. Por cierto, Millet, galardonado con la Creu de Sant Jordi en el año 1.999 era patrono del Institut Catalunya Futur, sección regional de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES) bajo la presidencia de D. José María Aznar López. En el mismo año de su incorporación a la FAES (2.003), la Fundación Orfeón Catalán recibía un incremento de tres millones de euros del Ministerio de Cultura español del gobierno central presidido por el propio Aznar. ¿Qué son unos durillos en comparación con la independencia?