ROBERTO CENTENO.
“El sol vuelve a brillar en Benidorm”. Este era el llamativo, a la vez que engañoso, título del último informe de JP Morgan publicado la semana pasada. Llamativo porque parece que ya se ve luz al final del túnel, engañoso porque nada más lejos de la realidad. Lo del sol se refiere sólo a que cuando los descuentos en los pisos llegan al 85%, y cita los casos de Torrevieja y Seseña, estos se venden sin problemas. Cuando no, ni brilla el sol ni nada que se le parezca. Su opinión general sigue siendo la misma que en septiembre: “Nos vamos de Madrid más asustados de lo que vinimos”.
El informe critica la inaudita política del banco malo, que tras despilfarrar decenas de miles de millones de nuestro dinero en pisos con descuentos de sólo el 50%, ha decidido venderlos un 25% por encima del precio de compra, lo que según JP beneficia descaradamente a los grandes bancos. En lugar de competir y contribuir a la rebaja de precios, le imponen precios cuatro veces (1) más altos de lo que JP considera necesario para que “el sol vuelva a brillar”. A Belén Romana, la enchufada de Luis de Guindos que no tiene ni idea del tema, le da igual vender o aparcar: ella sigue con sus 500.000 euros, su coche con chófer y sus oficinas en la zona más cara de Madrid. ¿No iban a instalar su sede en las afueras como Apple o Microsoft? Esto lo pagan los españoles. Otra estafa inaudita añadida a un robo masivo: ¡todo por la banca!
Y por si alguien tenía alguna duda, Mario Draghi, después de las felicitaciones habituales, explicó recientemente lo obvio: que su compra de bonos, y no Rajoy, fue el salvavidas de España ante la quiebra económica y bancaria (2). No obstante, lo grave es que dejó muy claro a los representantes de los partidos (que no de los españoles) en el Congreso que “son necesarios más recortes y más impuestos”. Es el resultado del primer año mariano. Ahora decidan el valor que otorgan a la promesa de Rajoy de que no habrá más recortes ni subidas de impuestos.
La reforma laboral
La pasada semana se cumplió un año de la reforma laboral, “la decisión más necesaria y urgente que necesitaba España”, según Rajoy. Porque la urgencia no era, como pensamos los catastrofistas, recortar el despilfarro, las miles de empresas públicas, ni los cientos de miles de enchufados, familiares y amigos. No, nada de eso: lo necesario era poner en marcha un mecanismo para poder despedir trabajadores a bajo precio. “Ya se están empezando a observar los primeros indicios de un cambio en el mercado de trabajo”, dijo el martes este paladín de la mentira en el foro de The Economist. ¿A qué se referiría Rajoy? ¿A la pérdida de 263.000 cotizantes de la Seguridad Social (empleos contantes y sonantes) en enero?
El principal objetivo de la reforma laboral era “profundizar en la flexibilidad interna para frenar la destrucción de empleo. Esta es la reforma en la que ganamos todos”. Y como era perfectamente previsible, y así lo denunciamos algunos, un año después no es que no haya servido para crear empleo, es que ha actuado como acelerador de la destrucción de puestos de trabajo: en doce meses se han destruido 840.000 empleos, un 42% más que el año precedente. La afirmación de Báñez y De Guindos de que, sin la reforma, el paro habría sido mayor es un insulto a la inteligencia: en 2012, con una caída del PIB del 1,4%, la destrucción de empleo fue más del doble que la de 2009, con una caída del PIB del 3,6%. Peor aún, la destrucción de empleo junto con la reducción salarial, que es el otro efecto de la reforma laboral, está hundiendo la demanda efectiva, lo que hace imposible la recuperación. Ni tienen vergüenza ni saben economía.
Y en cuanto a la flexibilización, como explica el profesor García Díez de la Universidad Rey Juan Carlos, la reforma “ha desequilibrado la relación entre trabajadores y empresarios a favor de los empresarios y, con la mayor facilidad de despido, el empresario carece de incentivos para buscar esa flexibilidad interna y opta por los despidos”. Ahora dicen que servirá para crear empleo cuando empecemos a crecer, pero “es un hecho probado que las legislaciones flexibles no crean puestos de trabajo cuando llega la recuperación económica”, afirma el profesor Juan Torrent de la UOC Business School.
Las tres reformas del sistema financiero
Pero si la reforma laboral es un acelerador de la destrucción de empleo, las tres reformas del sistema financiero constituyen el mayor expolio conocido al pueblo español. Todo empieza en 2006, cuando los Inspectores del BdE alertan al gobernador y a Pedro Solbes de la burbuja y les urgen a ponerle fin. No sólo no hacen el menor caso, sino que, además, en la primavera de 2007, cuando todos los medios extranjeros denunciaban la burbuja, estos insensatos mienten a familias y empresas diciendo que “cuanto más se endeuden más ricos serán, porque los pisos nunca pueden bajar de precio”. El sistema financiero y las inmobiliarias colaboraron activamente en el engaño. En cualquier otro país, Solbes y MAFO habrían sido procesados. En lugar de ello, andan sueltos y con indemnizaciones millonarias.
Rajoy heredó de Zapatero un sector financiero quebrado y un BdE que había colaborado activamente en la ocultación del desastre. Lo lógico, lo que se ha hecho en el resto del mundo, era cerrar todo lo inviable devolviendo los depósitos de hasta 100.000 euros, que con la venta de los activos habría sido más que suficiente, mientras que los tenedores de deuda, desde lasenior a las preferentes, habrían perdido todo o casi todo. Ahí estaban, en primer lugar, las cajas alemanas y francesas, que financiaron con sus préstamos insensatos a personas insensatas y a presuntos delincuentes toda la burbuja. El costo para los ciudadanos habría sido cero.
¿Qué han hecho estos depredadores que nos gobiernan? Justo lo contrario. Las cajas alemanas y francesas recuperaron todo, y a los presuntos delincuentes que llevaron las entidades al desastre se los indemnizó generosísimamente. ¿Y quién paga la fiesta? Los españoles actuales y futuros, dado que nos han endeudadobrutalmente para varias generaciones. En concreto, sumando todo, unos 40.000 millones de euros perdidos ya, otros 100.000 millones en esquemas de protección de activos, inyecciones de capital que no se recuperará y banco malo. Y a esto añadan ustedes más de 150.000 millones en avales, de los que nos tocará pagar unos80.000. En conjunto, 290.000 millones, sin contar los 300.000 que el sistema debe al BCE. Una malversación inimaginable de fondos públicos.
El caso Bankia ilustra perfectamente la profundidad del disparate y la dimensión del saqueo a los españoles. Este conglomerado de cajas nos ha costado en dinero efectivo 25.000 millones, banco malo, 23.000, avales, 50.000… un total de 98.000 millones robados literalmente al pueblo español. Además, ¿cuánto debe Bankia al BCE que no podrá devolver y pagaremos nosotros? 40.000 millones. Es decir, estos hijos de su madre han despilfarrado 138.000 millones de euros de nuestro dinero por no cerrar un banco cuyo valor en bolsa es, hoy, de 800 millones y, según el FROB, negativo. Y todo para pagar hasta el último céntimo las deudas contraídas por unos insensatos con cajas alemanas y francesas, algo que no se ha hecho en ningún otro país del mundo. Grecia, Irlanda o los países del Este aplicarían quitas de hasta el 90%. Alguien debería ir a la cárcel por esto.
Ahora traduzcan todo esto a impuestos, a destrucción de empleo, a recortes sociales salvajes, a endeudamiento de las generaciones futuras, y obtendrán algo monstruoso: nadie ha sido procesado ni está en la cárcel. “Hemos hecho lo que teníamos que hacer”, dice Rajoy. Debería decirlo ante un juez. Pero, además, no ha servido para nada. Al final se están cerrando oficinas y despidiendo a decenas de miles de empleados, equivalentes a lo que debería haberse cerrado desde el principio. La recuperación del crédito a familias y pymes, que estos tramposos dicen que era el principal objetivo, no sólo ni está ni se le espera: es que cae en vertical.
Y ya el colmo de los colmos, la supervivencia del sector dista de estar garantizada, porque la morosidad está subiendo exponencialmente: casi 200.000 millones a septiembre, sólo la barra libre del BCE y los 100.000 millones que nos dieron para que devolviéramos los préstamos a las cajas europeas, mantienen abierto el sistema financiero. El disparate es tan gigantesco, el daño tan inconmensurable, que los responsables no se pueden ir de rositas. En algún momento Zapatero, Solbes, MAFO, Salgado, Rajoy y De Guindos tendrán que responder por el daño casi ilimitado que han ocasionado a varias generaciones de españoles.
Consolidación fiscal y control de las CCAA
Y, por último, la supuesta consolidación fiscal y el más imaginario aún control de lasCCAA. Según Montoro, el gasto en los ministerios va a caer de 42.328 millones a 31.000 previstos para 2013, lo que significa la incapacidad absoluta para financiar España, dejándola sin infraestructuras, sin medios mínimos en Justicia, Policía, Fuerzas Armadas, ni en ninguna parte. Un 25% menos de lo que gasta la Generalitat, en plena orgía secesionista, mientras ni el Rey ni Rajoy mueven un dedo para frenar a esos traidores. ¿Es la destrucción de España como nación el motivo de orgullo de estos miserables? Pero es que, además, es una ridiculez comparado con un gasto de las AAPP de más de 382.000 millones previstos en los PGE, exceptuando la Seguridad Social, con otros 100.000 millones.
En cuanto al control de las CCAA, ¿de qué control hablan? A principios de 2012, más de la mitad estaban quebradas. Montoro juró que las intervendría; ¿qué hizo en realidad? Darles 60.000 millones de euros de nuestro dinero para que pudieran seguir despilfarrando sin problemas, y otros 28.000 que tiene preparados para 2013. Ha endeudado hasta lo indecible a los españoles para que golfos y corruptos puedan seguir con sus enchufados, sus empresas públicas, sus televisiones, sus coches y sus embajadas. ¿Es eso controlar el gasto?
El resumen de las reformas que van a sacarnos de la crisis es claro: una reforma laboral que es un acelerador y no un freno de la destrucción de empleo; tres reformas financieras que han supuesto la malversación del 28% del PIB en dinero y avales públicos, mientras reducen drásticamente la financiación a la economía productiva; un recorte que deja sin recursos el funcionamiento de España, mientras mantiene el despilfarro de CCAA y ayuntamientos, y los impuestos más altos de Europa, más un aumento de la deuda de casi 130.000 millones en 2012 y una previsión de casi 100.000 en 2013. Y todo esto es lo que, según Rajoy y sus secuaces, nos va a sacar de la crisis. Peor aún, porque “el afán reformista de este Gobierno ni se distrae, ni flaquea, ni se agota”; están dispuestos a llevar a España a su aniquilación. Sólo espero que paguen por ello.
NOTA: Leo estupefacto que las exportaciones suponen ya el 33% del PIB. Este disparate sale de considerar PIB al valor total de ventas al exterior, pero el PIB no son las ventas, sino los VALORES AÑADIDOS, que son mucho menos de la mitad. Además, la aportación al PIB es la diferencia entre exportaciones e importaciones. El nivel de engaño de estos tramposos es realmente alucinante.
(1) Para JP Morgan el descuento que se necesita para que el sol vuelva a Benidorm es del 85%, es decir, un piso que valía 100 debe venderse por 15. El banco malo ha comprado a la banca esos mismos pisos por 50 y ahora pretende venderlos a 62,5.
(2) Draghi ha explicado que España es el primer beneficiario de la barra libre del BCE con unos 300.000 millones, o el 30% del total, mientras que la economía española sólo representa el 12% del PIB de la Eurozona.