MATÍAS DÍAZ PADRÓN.
Después de los testimonios del padre Santos y Velázquez, el lienzo de Van Dyck sigue en el manuscrito anónimo de 1698 (quizá de Alonso de Talavera) que lo ve sobre la puertecilla siguiente [del Atrio o Zaguán] está una Nuestra Señora, es de Antonio Van Dick, flamenco[1]. Numerosos testigos en el siglo XVIII nos confirman su permanencia en el mismo lugar. No pasó desapercibido al Vago Italiano (Norberto Caimo 1755): Dall´altro lato sopra la pirma porta corresponde al Ribera il celebre Vandik con una Vergine, che porta il Bambino, lavoro che mostra tutte le pittoresche bellezze (…) Le quatro reiferite opere sono state date da Filipo IIII. Le oltre quattro poste in quess´atrio conservansi dal tempo di Filippo II[2]. Igual Andrés Ximénez (1764)[3] y Antonio Ponz (1773) alabando Las salas de los capítulos, situadas al mediodía de la fábrica, [que] tienen su entrada por el claustro baxo, á cuyo piso están. Se reducen a tres piezas: la del medio es como antecámara de las otras dos, y contiene las pinturas siguientes: (…) De Vandyck es una nuestra Señora con el Niño, hermoso quadro, y pintado con el mejor gusto de color[4]. El autor del anónimo manuscrito publicado por Ángel Custodio (que hoy sabemos es Ceán Bermúdez) omitió las pinturas del atrio por considerar innecesario repetir la carta cuarta nº 28 de la primera edición de don Antonio Ponz. Así, está implícito el lienzo que tratamos, limitándose a afirmar que allí estaba lo mejor de El Escorial[5]. Para Antonio Conca (1793) la pintura de La Virgen y el Niño es un bellísimo cuadro del mejor gusto de Van Dyck: … como pure si è Nostra Signora col Bambino un bellísimo Quadro tra´belli del Wandick dipinto con quel miglior gusto di colorito, che sapeva dare alle sue immagini…[6].
La estancia del atrio se abría a los Capítulos prioral y vicarial. El montaje se debe a Velázquez y da testimonio muy directo el padre Julio Chiflet. Es un prestigioso visitante que vive aquellos momentos, fue capellán de honor del rey a quien acompañó Velázquez en su visita a la colección del monasterio. Fue testigo de la generosidad del rey en aquella casa y del quehacer de Velázquez como museólogo[7]. Atrae los ojos por la excelente pintura y amplitud del espacio. Tomó nota de las pinturas de Van Dyck entre las que estaría la que nos ocupa[8]. Tuvo comentarios para los marcos labrados y dorados con la compañía del marqués de Aytona a quien Van Dyck retrató en el mas bello caballo del género[9].
El atrio tiene ya completa su decoración en la edición del padre Santos de 1667 citada, pero en la de 1657 y Memoria de Velázquez de 1656 están cinco sin precisar los asuntos. Entre ellas estaría la Virgen con el Niño de Van Dyck. La distribución según el plano de Bassegoda sería la que sigue: San Juan Bautista de Ribera y Cristo Bendiciendo de Tiziano (perdido). En el muro frontal La Virgen y el Niño de Van Dyck emparejado con la Anunciación de Federico Barocci (perdido). En el lado norte las bodas de Canaá de Veronés y en el sur San Jerónimo de Lorenzo Lotto, La Virgen con Santa catalina y San Sebastián, copia de Corregio y el Martirio de Santa Justina de Luca Giordano[10] .
El descalabro de las colecciones del monasterio por la invasión napoleónica va a alterar la historia como es bien conocido. Localizamos el lienzo en 1811 en el Palacio nuevo en la otra cámara del dormitorio de la reyna, precisando su procedencia de El Escorial: “66- La Virgen y el Niño Jesús. Idem [Vandik] traída del Escorial”[11]. Un año antes del inventario, las pinturas citadas de El Escorial están documentadas con este destino en las relaciones de Quilliet para enviar al Palacio por “Orden del rey intruso, en 15 de octubre de 1810”, entre ellos localizamos la Virgen y el Niño[12].
[1]Gregorio de Andrés, “Relación anónima del siglo XVII sobre los cuadros del Escorial”, Archivo Español de Arte (1971), p. 51.
[2] Norberto Caimo, Lettere d´un vago italiano ad un suo amico [A Messer Girolamo Cardano], firmado 1755, Pittburgo, ed. 1760, pp. 104-105.
[3] Andrés Ximénez Cisneros, Descripción del Real Monasterio de San Lorenzo del Escorial, su magnífico templo, panteón y palacio compendiada de la descripción antigua y exornada con nuevas vistosas Láminas de su Planta y Montéa, aumentada con la noticia de varias grandezas […], Madrid, 1764, p. 82.
[4]Ponz (1773), ed. 1788, II, pp. 123-124.
[5] “Verdadero orden de las pinturas del Escorial en los sitios que están colocadas con los nombres de sus autores año de 1776”, pp. 259-260 en Documentos para la historia del monasterio de El Escorial, 1962, tomo V, Volumen 3, editado por Ángel Custodio)
[6]Antonio Conca, Descrizione odeporica della Spagna in cui spezialmente si da notizia delle cose spettanti alle belle arti degne dell´attenzione, II vols., Parma, 1793, II, p. 85.
[7] G. de Andrés, Documentos del Monasterio de El Escorial, T. V. Visita de Julio Chiflet al Escorial (1656), p. 407
[8] Ibídem, pp. 409 y 410
[9] Ibídem, p. 411
[10]Bonaventura Bassegoda, El Escorial como museo, Barcelona / Gerona /Lérida, 2002, p. 190
[11] Juan J. Luna, Las pinturas y esculturas del Palacio Real de Madrid en 1811, Madrid, 1993, p. 108, nº 804. (Archives Nationales, France (ANF), Paris, Papiers Joseph Bonaparte, 381, AP 15, dossier 6. “Inventario de los Quadros y obras de Escultura existentes en este R1. Palalcio de Madrid” 19 marz 1811. Firmado por Feraud, administrador general de los muebles de la corona, y Manuel Álvarez, conserje de palacio)
[12]“Van Dyck. La Virgen y Jesús”. Pedro Beroqui, “Apuntes para la historia del Museo del Prado”, Boletín de la Sociedad Española de Excursiones (II trimestre, 1931), p. 96; Ilse Hempel Lipschutz, “El despojo de obras de arte en España durante la guerra de la Independencia, Arte Español revista de la sociedad española de amigos del arte, tomo XXIII, 3ª época, 1961, p. 249. “Van Dyck. La Virgen y Jesús”