JAVIER TORROX.
El fiscal es un mandado. Lo dice la Carta Otorgada que los juancarlistas llaman Constitución de 1978. Su artículo 124.2 dice que el Ministerio Fiscal ejerce sus funciones conforme al principio de dependencia jerárquica. Unas líneas más adelante, en el cuarto párrafo de este mismo artículo 124, se señala que el Fiscal General del Estado será nombrado por el rey.
1. Hecho: el jefe de los fiscales es nombrado por el rey.
2. Hecho: los fiscales trabajan obedeciendo las órdenes de sus superiores jerárquicos.
3. Consecuencia: la Fiscalía se opone a la imputación de la hija de quien nombra al jefe de los fiscales.
El fiscal es un mandado, sí. Pero no por ello puede la moralidad pública eximirlo del delito de proteger a una corrupta por el mero hecho de que la corrupta en cuestión sea la hija de este reyezuelo impuesto por un dictador. Usted, señor fiscal, es un delincuente. Y no uno cualquiera. Usted es un protector de criminales. Y no de criminales comunes, no. Es usted un protector de criminales que se valen de su posición o cargo en la estructura del Estado para cometer sus crímenes con la colaboración de quienes tenían la obligación de velar por el buen recaudo de lo robado, que era de todos. O dicho de otra forma, las administraciones públicas le regalan nuestro dinero a la niña del monarca y la Fiscalía dice que eso es estupendo, que a callar todos y que lo que tenemos que hacer nosotros es apretarnos el cinturón.
Ay, el apretamiento del cinturón. ¿No ves, ciudadano, que el poder repite este mantra una y otra vez para hacerte creer que te aprietas el cinturón por tu propia voluntad? ¿Acaso los trabajadores han demandado que les rebajen los salarios? ¿Acaso los asalariados quieren que les despidan? ¿Acaso los enfermos prefieren morir para que los hospitales ahorren? ¿Acaso las nuevas generaciones han pedido una peor instrucción pública para abaratar los costes de los colegios?
¿No ves el engaño? ¿No ves que te estrangulan mientras te dicen que lo hacen porque eso es lo que tú quieres y que lo deseas porque eres muy responsable? Te adulan con el engaño, ciudadano. Y tú les crees. ¿También crees a la Fiscalía cuando ésta dice que no hay por qué imputar a la hija del rey?
Ministerio Fiscal, eres el Turno de Oficio de los corruptos, ejerces la defensa de quienes nos han robado hasta traernos a esta catástrofe económica que ha producido seis millones de parados. Ministerio Fiscal, no eres cómplice. Eres culpable.
