SENTIDO DE LA REVOLUCIÓN FRANCESA: EL ÉXITO DE LA POLÍTICA ECONÓMICA DE NECKER ES LA CAUSA DE SU FRACASO POLÍTICO.
Necker consigue evitar la quiebra del Estado francés en un momento político y económico muy complicado: el que va desde su nombramiento el 8 de agosto de 1788 hasta los Estados Generales.
Durante este corto periodo de tiempo, que no llega al año, consigue paliar el problema del déficit solicitando nuevos créditos y anticipos a los prestamistas. Esto supone delegarles el cobro futuro de los impuestos, descontando su precio para el Estado, y favorecer los beneficios de las altas finanzas a las que él, como banquero, pertenecía.
El éxito de su política económica es la causa de su fracaso político. El Tercer Estado consideró a Necker un aliado en su proyecto de reformas liberales y de igualdad de derechos pero no iba a apoyar a un ministro del Estado absoluto que pudiera resolver el problema del déficit sin necesidad de alterar el orden de las jerarquías sociales.
El déficit del Estado era el Tesoro de la Nación, es decir, de la Revolución. Sin déficit el Estado no necesitaba una reforma institucional ni constitucional. Por eso el rey, tras el conflicto que enfrentó a los órdenes privilegiados con el Tercer Estado, percibió que ya no necesitaba a los Estados Generales, dio marcha atrás en su proyecto de reforma, se puso del lado de la aristocracia y preparó la reacción.
La semana que viene veremos cómo la defensa de los comunes del voto individual dentro de los Estados Generales y la negativa de la nobleza a renunciar al voto por órdenes y a unirse en una sola Asamblea conjunta propició la autoproclamación del Tercer Estado en Asamblea Nacional.
Presentado por Adrián Perales Pina