Se refugia tras la barba atildada,
nadie ha visto su rostro verdadero,
ni qué esconde detrás de su sonrisa
de Pan, quizás el pánico, quizás
sea el minotauro del laberinto,
quizás el alter ego de Teseo,
o un personaje incógnito de Kafka.
Como el fauno del que habla Rimbaud,
enseña la patita tras la puerta
de los despachos del Eterno Enigma.
No sabemos si tímido o cobarde,
no sabemos si sátiro o si fauno,
ni qué cara oculta tras la máscara,
qué aquelarre, qué tragedia, qué farsa.
Fotografía de Exfordy