Fueron 5000 personas según los manifestantes y 2000 según la policía y la Delegación del Gobierno, pero esta vez la manifestación que rodeaba al Congreso el 23-O no tuvo incidentes destacados ni violencias extremas de los agentes de seguridad. Los protagonistas fueron los lemas y las pancartas, y en esta ocasión hemos seleccionado los que estuvieron más certeros, pues además fueron ampliamente coreados y aplaudidos.
También los manifestantes fueron una muestra heterogénea de la sociedad española, pues acudieron ciudadanos de todas las edades, clases, ideologías y condición, según evidencian también las fotografías. Se apreció igualmente que los manifestantes comienzan a usar un lenguaje más preciso en cuanto a las reivindicaciones, como muestran los hashtags #23O En la Asamblea Constituyente y #23O #RodeaelCongreso Debate ciudadano sobre procesos constituyentes.
De hecho, uno de los puntos del manifiesto, aunque no exacto del todo, pues sigue mezclando la reivindicación social con la política, sí al menos menciona que “mientras no existan mecanismos reales de participación ciudadana en la actual Constitución y los partidos políticos puedan modificarla en contra de los intereses ciudadanos, la única respuesta que nos queda es la desobedeciencia civil y la apertura de un nuevo proceso constituyente”. El diario “Público.es” revelaba que “hay cerca de 200 personas reunidas en la asamblea que debate sobre el proceso constituyente ahora mismo junto a la valla que cierra el paso al Congreso en Neptuno, informa Eduardo Muriel”.
La primera imagen muestra un cartel portado por un manifestante con una gráfica petición: “Abrir un proceso constituyente”, como se aprecia en la parte inferior de la foto. Habrá que recordar que el 25-S, la primera concentración que se reunió frente a las Cortes, también reclamaba, de manera tentativa y sin apenas profundizar, un “proceso constituyente”.
“No nos representan” fue un eslogan que se inició en el 15-M, prosiguió el 25-S y este martes también se vio en forma de pancarta en la concentración.
Hubo también pancartas que aludían a la partitocracia representada por las dos formaciones mayoritarias, PP y PSOE, que algunos manifestantes identifican ya plenamente por su descarada comunión de intereses.
Por último, otros manifestantes se refirieron en su protesta parlamentaria al clima de corrupción que asola la economía del país y que transparenta la complicidad de la política, la justicia y la banca, junto con la ausencia de separación de poderes.
