Después de ser invitado a la cumbre del G-20 en Washington y ser recibido por fin en la Casa Blanca, algo ha cambiado en el espíritu de Zapatero, en su manera de ver las cosas al otro lado del Atlántico, tal como se ha comprobado en la entrega de los Premios de Periodismo de El Mundo, donde ha confesado compartir con el director de ese periódico “la admiración por la democracia americana, por su Historia y por el legado de sus padres fundadores, revestido de un cierto carácter épico para los demócratas de todas las latitudes”. Con un pasado “emblemático”, un presente “decisivo” y un futuro “relevante”, conforme a la visión del jefe del Ejecutivo español, la democracia americana, a causa del triunfo esperanzador del cambio que representa Obama, “está viviendo uno de esos momentos particularmente benéficos y radiantes que trascienden las fronteras de EEUU para iluminarnos a todos”. Esperanza Aguirre tampoco ha perdido la oportunidad de manifestar su admiración por los Estados Unidos, porque es el país “que más ha hecho por la defensa de la libertad, junto con el Reino Unido”; por eso, “le dolió mucho” ver a Zapatero “sentándose al paso de la bandera americana” en el desfile de la Hispanidad de 2003; de todas maneras, afirma estar segura de su arrepentimiento, aunque ahora, “puesto que tanto le gusta Obama, sería bueno que pidiera disculpas” por aquel desaire. El señor Rodríguez Zapatero concluyó su intervención en la sede de El Mundo, pidiendo, en general, “que seamos capaces de sentir y expresar esa admiración por nuestra propia democracia, porque no nos faltan motivos”. La misma Esperanza ha declarado recientemente que la derecha estatal ha de sacudirse sus complejos franquistas porque “el Partido Popular nace en la democracia” y que “no es verdad que hubiese memoria o amnesia impuesta” cuando muere el dictador, sino que los protagonistas políticos de aquellos años “recordaban lo que fue la República y la Guerra Civil y por ello hicieron La ley de Amnistía y la modélica Transición”. Los iluminados por el ajeno resplandor democrático siguen cegados por el consenso oligárquico propio. hechos significativos En presencia del Rey, el lehendakari Ibarretxe también reclama “el derecho a decidir” de los vascos para afrontar y superar su propia crisis económica. Abel Matutes se da de baja en el PP para evitar que el Gobierno balear siga entorpeciendo sus negocios.