Libertad Digital se ha caracterizado durante años por defender la falta de independencia judicial durante el gobierno de Zapatero, por lo que parecería que lucha por la democracia representativa en España; sin embargo, no es así, aunque no tenemos datos suficientes para determinar si es por desconocimiento de las nociones elementales de la organización política moderna, o, por el contrario, si se trata de una línea editorial expresa que admite la partitocracia. En el editorial del 27 de noviembre de 2011, en el que se analiza la situación del PSOE tras las elecciones del día 20, Libertad Digital confunde la forma de gobierno democrático en un estado con el funcionamiento democrático de un partido. Así, se afirma que la regeneración democrática del PSOE consistiría en dar paso a nuevos políticos del Partido. No habría nada que objetar a esta propuesta, si el PSOE fuera un partido político de la sociedad civil que se financiara por sus miembros, y no, como ocurre todavía en España, un órgano del estado que se nutre de los presupuestos generales, que Rajoy debería equilibrar reduciendo precisamente las subvenciones a los partidos, como ha recomendado la propia Esperanza Aguirre. Un olvido imperdonable. Como siempre en este periódico, el editorial critica la ideología progresista de Rubalcaba, al que se acusa de considerar al PSOE como de su “exclusiva propiedad.” ¿Es que algún partido político español es propiedad de sus miembros? ¿Es el PP propiedad de sus miembros? Libertad Digital parece estar tomando el pelo a sus lectores. Aun así, el editorial concluye: “Nosotros hemos defendido siempre la necesaria democratización del funcionamiento de los partidos políticos tal y como exige la Constitución Española”. Nosotros también. Lo que nos preguntamos ahora es si Libertad Digital defiende igualmente una democracia representativa en la propia Constitución Española, o si, por el contrario, limitan su defensa a la democracia interna de los partidos. El editorial añade a continuación que “los militantes [del PSOE] tienen derecho a que se escuche su voz y a decidir lo que quieren hacer con su partido de ahora en adelante”, refiriéndose con ello al derecho de los militantes a elegir a un nuevo jefe tras la debacle electoral. Por la misma razón, ¿no tienen derecho los ciudadanos españoles a elegir directamente al jefe de estado y de gobierno? Libertad Digital no defiende una democracia representativa sino una “democracia” partidista, y que, para colmo, afecta solamente al partido de la oposición pero no al partido cuya ideología comparte y defiende.