“El despotismo proscribe todas las formas de libertad; la usurpación para justificar el derrocamiento de lo que ha sustituido las necesita, pero al apoderarse de ellas las profana.” Benjamin Constant
Es natural que la clase política partidocrática confunda los términos Estado y Nación, para ellos es lo mismo; el lugar donde apacientan sus ambiciones. Unos lo hacen a lo inocente meneando la cabeza como movidos por un resorte invisible que sabemos se llama ambición. Parecen beber a diario en las sucias aguas de la política a lo Fouché; ejemplo de ello es la inteligencia bastarda de Rubalcaba; otros, con la firmeza que les da sus carencias repiten una y otra vez el término Estado para que vayamos sintiendo ese sobrecogedor miedo que produce palabra tan segura, Estado; pero todos saben que mienten porque en sus cabezas resuena la intención con las que las usa .
Talleyrand en su astucia volvió a la Iglesia en unas condiciones que Roma no podía aceptar pero que no tuvo más remedio porque cuando les llegó el escrito el remitente ya había muerto y no había posibilidad de retractación. Fraga ha legado un piso de 90 metros para pasmo de ingenuos.
Los presidentes de la partidocracia aparecen sonrientes en esta foto del toisón con la desvergüenza de sus privilegios y canonjías, con los cinco millones de parados , con una sociedad robada y empobrecida y un rey cañoneado desde el púlpito de El Mundo. Ellos no pueden decir lo mismo; ni han sido robados ni se han empobrecido y en cambio han hecho una gran labor por España y los españoles; ésta de robarles y empobrecerlos.
La prensa de la Monarquía de partidos se va encargando de que el suicidio se produzca controladamente. Que la partidocracia está gestionando su propia eutanasia parece claro. Las fases de esta muerte dulce del régimen puede que sean : abdicación del rey, interregno corto de Felipe y luego ya veremos .
Por lo pronto , no tienen ni la inteligencia de fingir que les duele España.
