Dos noticias han contribuido a desprestigiar aún más la vilipendiada imagen de la Casa Real española. El ex presidente balear del PP, Jaume Matas, ha pedido al juez del “caso Urdangarín”, José Castro, que pasen por el juzgado el ex presidente valenciano del PP, Francisco Camps, y el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, que fue su consejero, así como el ex alcalde de Alcalá de Henares, Manuel Peinado, y la ex consejera delegada de Madrid 2016, Mercedes Coghen. Todos ellos hicieron negocios con Urdangarín, según el abogado de Matas.
Por si la ampliación del eco de la trama no fuese suficiente, el propio rey Juan Carlos sufrió en sus propias carnes las consecuencias de su conducta. Según el diario “El Mundo”, el monarca recibió en la Zarzuela al gobernador de Florida, Rick Scott, y al preguntarle por su reciente operación de cadera, le soltó una gracia diciéndole que él también había montado elefantes “pero nunca he disparado contra ellos”. El monarca disimuló a su vez la impertinente broma con una ligera sonrisa.
Para Trevijano, esta anécdota no deja de ser reveladora: “La falta de respeto al Rey se extiende por el mundo, lo que tanto se decía de que era el mejor embajador de España, hoy se ha transformado en la lacra del país”.