(Foto: Partido socialista) Fiel a su amo Los sindicatos UGT y CCOO han convocado una manifestación en Madrid para el día doce de diciembre. Aunque en principio la cita era abiertamente hostil a los empresarios, un día después de anunciada los convocantes aclaran que “no va contra nadie” y “matizan” que el 12D no es contra la CEOE. La compañía pública RENFE ha puesto treinta y dos trenes (TALGO-AVE) a disposición de los sindicatos verticales del Estado. Un total de más de 12.000 plazas de alto nivel. CCOO por medio de un comunicado interno ofrece una “pequeña dieta” para los manifestantes. Resumiendo: un día laborable no trabajado que no se descontará de los salarios, un cómodo viaje a la capital, comida incluida, y un paseo por el Madrid monumental. Por supuesto los delegados sindicales serán los primeros en llegar en los trenes. Estas son las manifestaciones que en estos tiempos, después de treinta y cuatro años de monarquía partitocrática, acontecen en nuestra maltrecha nación. Atrás quedaron ya aquellas otras movilizaciones en las que los trabajadores acudían a manifestarse en masa, sin permisos oficiales y siendo conscientes de que más de uno podía llevarse una paliza. Normalmente dichas manifestaciones iban acompañadas de una “huelga salvaje” que seguía a un proceso asambleario de los asalariados. La manifestación del 12D será otro plato a servir a la oligarquía financiera Mundial. El Presidente del Gobierno podrá mostrar el grado de manipulación y sumisión que ha conseguido en la sociedad civil española para hacerle creer a ella misma que aún hay lucha de clases e ideologías y que él es tan “demócrata” que las manifestaciones corren por cuenta del contribuyente. Cuando la realidad es que el pobre manifestante, ignorante de que su única esperanza de salvación está en la conquista de la libertad política, acude con su dinero a un acto que va en contra de sus propios intereses como trabajador -o parado- y como ser humano.