Sin el menor asomo de autocrítica, el señor Rodríguez Zapatero se ha presentado, inmaculado, al debate parlamentario acerca del estado de la nación, para explicar las causas -ajenas a su voluntad- de la crisis en la que estamos inmersos, y las soluciones que adoptará, con la mayor dosis de voluntarioso optimismo, para atravesar “la peor tormenta financiera y económica que la economía internacional haya sufrido en los últimos cincuenta años”. A lo sumo, ha reconocido haberse equivocado en sus previsiones, tal como lo han hecho todos los organismos internacionales, aunque ha olvidado reseñar cómo él ha sido uno de los últimos en apartarse de una rosada visión de las cosas. Como si hubiese aterrizado en la Moncloa ayer mismo, Zapatero ha culpado del “boom inmobiliario” a Aznar, destacando los “efectos perniciosos” de la deducción fiscal por adquisición de vivienda, algo de lo que, a partir del 2011, ya no se beneficiarán los compradores con una renta superior a los 24.000 euros, merced a la iniciativa del presidente para seguir abaratando los precios de las casas y destinar más recursos al mercado del alquiler y a la vivienda de protección oficial: Rajoy ha clamado al cielo de las clases medias, acusándole de apalearlas y de darles la puntilla. Fiel a la consigna de “menos ladrillo y más ordenadores”, el jefe del Ejecutivo ha ilusionado a los niños de 5º de Primaria de los colegios públicos y concertados, y ha enternecido a sus padres, prometiéndoles a partir del curso que viene, pizarras digitales y conexión inalámbrica a internet en sus clases, y su propio ordenador portátil para que puedan hacer bien los deberes desde casa. Y a los licenciados en paro los animará a seguir estudiando, ayudándoles a realizar un máster. El resto de medidas zapaterianas: rebajas de los impuestos a los autónomos y a las pequeñas y medianas empresas, regalo de 2000 euros para comprarse un coche y un abono de transportes muy económico. El presidente no admitirá lecciones de un “maestro en perder elecciones” como Rajoy, porque, a pesar de que lo tomen por tonto en Europa, él ya ha demostrado saber ganarlas en España. hechos significativos Finalmente, se aprueba en Francia la ley contra las descargas P2P: cortarán internet durante dos años a los infractores, que tendrán que seguir pagándolo. Berlusconi retrasa su divorcio para no perder votos en las elecciones europeas.