Desde que el rey Juan Carlos decidiera salir de España el 25-S para intentar persuadir a The New York Times de las bondades de su reinado, todo son desgracias en la Casa Real. Mientras la policía o bien se infiltraba o bien apaleaba a los manifestantes que se concentraban en los alrededores del Congreso y llegara incluso a entrar en la lejana estación de Atocha persiguiéndoles (lo que ha dado lugar a un expediente disciplinario a los agentes), el monarca departía con la plana mayor del diario norteamericano, que lograba sonsacarle algunos datos para cifrar su inmensa fortuna en 1800 millones de euros (2300 millones de dólares).
Como con apenas 8 millones de euros de presupuesto de la Monarquía y un sueldo de 292.000 euros anuales el rey ha podido amasar un patrimonio así es algo que aún no ha podido saberse (aunque sí imaginarse) ni dentro ni fuera de España, pese a las investigaciones esporádicas de medios de comunicación europeos y universidades como la de Bruselas (Bélgica). Sin embargo, El Confidencial.com ha avanzado un paso más y su periodista Manuel Lobo ha logrado conocer que “el Rey ha comprado en los últimos años varios inmuebles, en España y fuera de nuestro país, y valiosas obras de arte, además de haber invertido en bolsa importantes cantidades”. Y añade que “tanto esas propiedades inmobiliarias como las cotizadas pinturas e inversiones financieras de Don Juan Carlos no figuran a su nombre”.
Para mayor infortunio, la agencia Europa Press ha informado que La Delegación del Gobierno en Castilla y León ha notificado a la Asociación Contra la Tortura y el Maltrato a los Animales (Actyma) la apertura de un expediente sancionador contra el ex yerno del rey y padre de sus nietos, Jaime de Marichalar, a raíz del accidente sufrido por su hijo Felipe Juan Froilán cuando, accidentalmente, este último se disparó en un pie el día 9 de abril cuando ambos se encontraban en la finca familiar Garrejo de Garray (Soria).