Joan Piqué Vidal era el letrado de Jordi Pujol, ex presidente de la Generalitat. Como abogado, lo defendió a capa y espada, movió Roma con Santiago y Barcelona con Girona para que no le procesaran por el caso de Banca Catalana, y llegó incluso a corromper a un juez para lograr sus fines Era el “caso Estevill”, magistrado que también dio con sus huesos en la cárcel. Por ello, y ante la sorpresa de toda la clase política, el “honorable” Joan Piqué, a quien Jordi Pujol no iba a dejar nunca tirado, terminó entre rejas. Hoy Jordi Pujol lo ha convertido en actualidad al airear de nuevo el “caso Banca Catalana”. Entonces no existía internet.
Desde la prisión de Brians, Piqué Vidal iba a las ocho de la mañana a un centro colaborador de Cáritas en aplicación del régimen flexible que le aprobó el Departamento de Justicia para cumplir una condena de siete años de cárcel por el “caso Estevill”. “Aquí se aprenden cosas muy positivas y lo que explicábamos en la Universidad se ve desde otro punto de vista”, comentó el letrado a El País durante el trayecto que separaba la entrada de la cárcel del aparcamiento destinado a las visitas.
“Las cosas se han de llevar con resignación. Hay que aprender de todo en la vida”, comentó el abogado. Después añadió que “los valores son los mismos”, en la cárcel y en la Universidad. Rememoraba así las décadas en las que compaginó la abogacía con las clases de Derecho Penal en la Universidad de Barcelona, en las que explicaba con profusión la aplicación de la ley en los delincuentes.
El periodista Josep María Cortes lo describió así: “El prestigio de sus mejores años le valió a Piqué la histórica defensa de Jordi Pujol en el caso Banca Catalana, un asunto que desmontó la duda sobre la trayectoria del honorable President. Gracias al pactismo entre bambalinas de Piqué Vidal, Pujol no llegó al juicio oral al que parecían haberle sentenciado los papeles de la banca que el financiero Eusebi Díaz Morera le entregó al entonces jefe de la Inspección del Banco de España, Mariano Rubio. Como es bien recordado, éste último, llegó a gobernador pero desapareció años después del cuadro de mando del supervisor a causa de un delito de iniciados, cometido junto a su socio Manuel de la Concha”. Era el “caso Ibercorp”.
¿Por qué escogió Pujol como abogado a Piqué Vidal? Pericia no le faltaba. En 2005 fue implicado en un envío clandestino de 5,5 millones de euros que pretendía trasladar a México en avión privado una red de blanqueo de dinero desarticulada en Barcelona, y que en total pudo llegar a “lavar” 236 millones de euros. Según informo entonces la Dirección General de la Policía, el abogado barcelonés fue detenido y prestó declaración ante la Policía en calidad de imputado bajo la acusación de haber asesorado a la red de blanqueo de dinero, tras lo que quedó en libertad. La Policía investigaba la presunta implicación del letrado en el envío de 5,5 millones de euros fruto del tráfico de drogas que la banda pretendía hacer llegar a México en un avión privado procedente de Chicago que tenía previsto salir del aeropuerto de El Prat y hacer escala en el aeropuerto canadiense de Gandeer.