“El Gobierno cede al Banco Central Europeo la tutela de la reforma financiera española”, coincide hoy en titular la prensa. Y el ministro de Economía, Luis de Guindos, acepta de Bruselas que en el plazo de dos meses se presente públicamente el resultado de las valoraciones independientes sobre los activos inmobiliarios que poseen los bancos.
La pérdida de soberanía económica española es ya tan evidente que cada minuto que Fernández Ordóñez permanece al frente del Banco de España aumenta el riesgo, según Trevijano. “El Gobernador que puso el PSOE está cansado, alicaído y derrumbado. No sé si avergonzado pero sí moralmente hundido. Está políticamente desprestigiado y es despreciado dentro y fuera de España. Ha fracasado y cuanto antes se vaya, mejor. Da igual que sea un cese o una dimisión, pues cada minuto que permanece en el cargo se hace más peligroso para la economía española”.
“Si sigue sin existir una autoridad económica y financiera que ejerza el papel de regulador, hasta el nuevo Gobernador del Banco de España tardará tiempo en volver a gozar de predicamento. La banca española también está humillada, porque nadie en España ni en el resto de Europa se cree sus cuentas, piensan que oculta sus datos negativos y por eso esa tutela es vergonzante”, dijo el letrado en Radio Libertad Constituyente, aunque concluyó: “Mejor la humillación y las cuentas claras, que no la independencia y las cuentas oscuras”.