En el último diseño de la portada del Diario he realizado algunos cambios que han mejorado sensiblemente la estética. Siguiendo las sugerencias de los comentaristas más expertos, he reducido la dimensión del logotipo, hasta el límite que no altera la calidad de la creación original de Miguel. También se ha degradado el azul de la cabecera y del faldón hasta fundirlo con el blanco marfil de la página. He disminuido y equilibrado los título de conexión a las paginas 2 y 3, para dejar un espacio entre Panóptica y Criterio, destinado al anuncio de las columnas de la página 3. Para que el diseño de la portada sea definitivo, solo falta eliminar las líneas de la ventana de la fotografía y degradar sus bordes, si fuera posible, hasta que parezca surgir de la propia página.
En dieciocho días, los datos estadísticos del diseño y contenido de la portada del Diario son estos: 3.400 visitantes, muy poco más de 1.000 lectores diferentes y 8.300 páginas leídas. La cifra de lectores confirma mi cálculo sobre el número actual de miembros y simpatizantes del MCRC. Teniendo en cuenta que el Diario se reduce por ahora a una sola página y que aun no lo hemos anunciado, estamos en la misma situación de una revista que comenzara su publicación teniendo 1000 suscriptores. No es mucho, pero es una base firme de partida. Todo dependerá de la riqueza de contenido de la página (on line) Panóptica y de la calidad de los artículos de la página Criterio.
No quiero ocultar mi desencanto con los cronistas y articulistas que pretenden escribir en el Diario. Esperaba que fueran más conscientes de su responsabilidad. Tanto en el envío a tiempo de los textos, como en la calidad exigida. Hoy he tenido que componer casi por completo la portada. El texto de Fernando, muy corto, pero muy bueno. La crónica de Tony, demasiado larga, poco estructurada y sin ir acompañada de los hechos significativos, que debe seleccionar el cronista. Así no puedo continuar. Sería engañarnos. Hasta ahora solo Oscar, David Serquera y Fernando no han necesitado mi supervisión. Me cuesta más tiempo corregir y completar, respetando el punto de vista del autor y su estilo, que escribir nuevos textos. Y sigo sin comprender por qué no se ajustan las crónicas al espacio dedicado a ellas en el Diario.
Los cuentos de Tony son excelentes para la página 3. Puede hacer uno diario. Y sería una sección fija, con foto o caricatura, muy atractiva. Mientras no esté diseñada esa página, ruego a los comentaristas que no pongan en este blog sus artículos. Solo contestaré a los comentarios sobre el diseño, contenido de la portada y propuestas de crónicas del como sí.
La página 3 comenzaré a diseñarla tan pronto como vea los diseños que están preparando, los más expertos, sobre la página “on line” Panóptica. El trabajo de Miguel es muy bueno y alentador. Me satisface por completo. Pero me preocupa la dispersión que observo en los últimos comentarios. Dan la impresión de que consideran más urgente la difusión del Diario que su creación. Y me alarma la falta de noticias sobre el estado en que se encuentran los proyectos de diseño de la página Panóptica.
Retrasaré la publicación del número 1 del Diario todo el tiempo que haga falta hasta contar con un buen diseño de las páginas 2 y 3, y con unos escritores que no solo digan la verdad, como lo hacen, sino que la expresen con la originalidad, el vocabulario, el rigor gramatical y la finura de estilo que requiere la elevación cultural de los primeros repúblicos. Creo que lo podemos conseguir si os empeñáis en esa tarea. Y si releéis varias veces en tiempos separados lo escrito, veréis que está sobrado de frases hechas y repeticiones, hasta de palabras en un mismo párrafo, Para mí, lo más urgente es recibir textos que no tengan necesidad de correcciones. El cuidado en la escritura consiste en llevar al teclado lo que está bien concebido, bien pensado y redactado con la claridad de la oración sujeto-verbo-predicado. El propio acto de escribir bien obliga al proceso de estar pensando bien cada frase. Pues en la forma de construirla se compromete la singularidad mental y cultural del escritor.
He recibido algunos ejemplares de mi libro Ateismo Estético, editado en Méjico e impreso en China. Creo que estará en librerías hacia mediados de Enero. La edición es muy lujosa. Aunque la letra es un poco pequeña, resulta fácil de leer y la portada es muy atractiva. Espero que el peso del papel couché corresponda al del cuerpo literario “echado” sobre él. Y recomiendo a mis amigos que lean con mucho detenimiento el capitulo dedicado al “Arte de pensar y de mirar el arte”. Tal vez les sirva para escribir como se puede esperar de su inteligencia y cultura.