El caso de evasión y fraude fiscal de Xabi Alonso (Real Madrid) y Javier Mascherano (F. C. Barcelona) destapado por la televisión portuguesa no es el único en España. Montserrat Caballé, Arancha Sánchez Vicario, Fernando Alonso, Carlos Moyá, Alex Crivillé… Son tantos los deportistas y artistas españoles o residentes habituales que cambian hasta de nacionalidad o residencia con tal de no pagar impuestos, que la lista sería interminable. Y lo que es peor: siguen siendo ídolos de masas en España y nadie les recrimina su actitud.
“Entre otros casos de fraude fiscal reciente, podemos citar el de el piloto de motos Sete Gibernau -2,8 millones evadidos en Suiza-, el del directivo de RBA Ricardo Rodrigo -2,3 millones, enviados también al país helvético- o el de la alcurnia Carulla, propietaria de Agroalimen, la primera industria alimentaria catalana que está siendo investigada por la evasión continuada y cuyo fraude podría llegar a los 180 millones de euros enviados a las Antillas Holandesas. Demetrio Carceller, propietario de Cervezas Damm SANO, también está imputado por un fraude fiscal continuado durante los últimos 15 años, y por un valor que ascendería a los 500 millones de euros”, según ha denunciado el periodista César Pérez Navarro en “Tercera Información”.
Y añade: “Igualmente, hay que mencionar casos en los que los defraudadores consiguen evadir impuestos cambiando de nacionalidad a pesar de desarrollar la mayor parte de sus actividades profesionales en España. Es el caso de la tenista Arancha Sánchez Vicario, quien es fiscalmente andorrana, como Montserrat Caballé. El del piloto catalán de F1 Pedro Martínez de Rosa, el de Fernando Alonso o el tenista Carlos Moya, quienes son fiscalmente suizos… De nacionalidad monegasca es Àlex Crivillé. Y siendo jugador del FC Barcelona, Luis Enrique era fiscalmente nacionalizado suizo. Otros muchos nombres de grandes empresarios anónimos para la sociedad podrían citarse”.
También cita como ejemplo la trama de corrupción en la que tras 12 años de juicio se condenó a seis años de prisión al ex presidente del F. C. Barcelona y constructor José Luis Núñez y a su hijo Josep Lluís Núñez y Navarro, así como al exjefe de la Inspección de Hacienda en Cataluña Josep Maria Huguet (13 años) y a los ex inspectores Manuel Abella (11 años), Roger Berga (9 años) y Alvaro Pernas (12 años).
Incluso se han dictado penas de prisión para el abogado Juan José Folchi (7 años y medio) y al asesor financiero de Núñez y Navarro, Salvador Sánchez Guiu (6 años), pero ninguno de ellos ha pasado por prisión. A pesar de que la fiscalía pidió cárcel provisional en tanto el Tribunal Supremo resolvía los últimos recursos, la Audiencia de Barcelona estimó que durante los 12 años que se prolongó esta causa los condenados no habían manifestado “ninguna voluntad de rebeldía” contra la justicia.
El más reciente es el de Alonso y Mascherano. Según apunta el programa ‘Sexta às 9″ de la Televisión Portuguesa (RTP) el centrocampista del Real Madrid, Xabi Alonso, y el defensa argentino del Barcelona, Javier Mascherano, habrían participado en una fuga millonaria de impuestos, informa Eurosport. Esto es lo que se desprende del reportaje emitido por la RTP bajo el lapidario título: “Fuga millonaria de impuestos: Xabi Alonso y Javier Mascherano mueven millones a la zona franca de Madeira”. Todo arranca en las fechas en que se producen sendos traspasos procedentes del fútbol inglés: Xabi al Madrid en 2009 y Mascherano al Barcelona en 2010.
Según apunta la televisión portuguesa el motor de la operación habría sido el empresario Ignasi Maestre Casanovas, dueño de “Igmasa Gestió Management Company Servicos e Gestao”, compañía de inversiones financieras con ramificaciones en diversos paraísos fiscales entre los que se encuentra la zona franca de Madeira. Maestre ya fue acusado hace diez años de evasión fiscal a Madeira a través de Andorra. Xabi Alonso se convirtió en el único accionista de la empresa Kardzali, cuatro meses después de hacerse jugador del Madrid, mientras que Javier Mascherano lo era de Anadyr Overseas, poco después de hacerse barcelonista. Ambas tienen sede en tierras portuguesas y ambos se habrían beneficiado de los descuentos concedidos por haber contratado, al menos, a un trabajador, que en el caso de la compañía de Alonso, y siempre según fuentes de la RTP, se trataba de una empleada con un sueldo de 70 euros al mes.
El responsable de crear ambas empresas, Ignasi Maestre, en las islas Madeira habría decidido transferirlas posteriormente a otras islas panameñas, de manera que al ser traspasadas a nombre de ambos futbolistas éstos pudieron beneficiarse de la nulidad impositiva en sendos paraísos fiscales (0% de impuestos en 2010 y 2011).
Mientras el representante de Xabi Alonso remitió a su abogado, Iván Zaldúa, el representante de Mascherano, Walter Tamer, rehusó responder a las preguntas planteadas que tuvieran relación con cuestiones puramente financieras. El ahorro fiscal de esta presunta operación con Alonso y Mascherano como destinatarios alcanzaría el millón de euros por cabeza, tanto en referencia a los contratos con sus clubes como en términos publicitarios.