Podemos habla ahora de la existencia de una trama de corrupción de la que, al parecer, no se habían apercibido hasta hace unas semanas. Lo señalamos en una Cuartilla hace unas semanas bajo el título “La trama de Podemos”. Ahí augurábamos, no sin sorna, que los de Podemos acabarían acusando a esta trama de las tonterías que los locos atribuyen a los templarios, a los rosacruces y a las conspiraciones judeo-masónicas.
Y hete ahí que va García-Margallo y los adelanta por la derecha. El genial Belbo descubrió un método infalible para diagnosticar locos: tarde o temprano atribuyen algo a los templarios. Qué personaje se perdió Eco con Margallo para “El Péndulo de Foucault”. En un alarde de erudición, el ex ministro instruía a Pablo Iglesias en el Programa de Ana Rosa sobre nada menos que los Protocolos de los Sabios de Sión. ¡Una de templarios!
Cualquiera que haya leído cuatro letras sabe que la chufla de los Protocolos de los Sabios de Sión que montó la Okrana de la muy antisemita Rusia zarista es un plagio ridículo de una mediocre aunque a ratos divertida obra satírica, el “Diálogo en el Infierno entre Maquiavelo y Montesquieu” del francés Maurice Joly.
Pues ahí va Margallo con su margallada, haciendo el ridículo cada vez que presume de hombre leído y cultivado. Menos mal que al menos ha dicho que fue un montaje antisemita.