Nebulosa del Águila (M16) Estrella fija de la libertad colectiva El pensamiento político de la libertad política colectiva es la estrella fija de las naciones europeas. En la historia reciente de Europa han pasado otros dos tipos de estrellas que la han destruido en medio de dos guerras mundiales: las estrellas fugaces de las ideologías liberales, fascistas y comunistas, y la estrella errante del Estado de partidos. El pensamiento ideológico, de uno u otro signo, nos proporcionó “espectaculares” golpes teatrales que hicieron obsesionarse a las mentes más brillantes de occidente, pero también a las más perversas, y llamaron la atención de masas enteras “bien intencionadas” de seres humanos hacia unas esperanzas ilusorias y utópicas. El pensamiento ideológico exclamaba: “ ¡ mirad! ¡ mirad ! ¡En la falta de coacción del individuo está la libertad absoluta y además la solución total a la pobreza y las miserias humanas ¡”, o en cambio gritaba: “ ¡mirad ¡ ¡mirad! ¡En un Estado total y con un poder fuerte y de clase, que lo planifique todo, podremos construir un “hombre nuevo” y con ello el paraíso en la Tierra !” Eran estrellas fugaces y desaparecieron para siempre entre holocaustos terribles. Pero la estrella errante de la partidocracia se confunde intencionalmente con la verdadera estrella fija y, por ello, se mantiene más tiempo en la mentes de los españoles y europeos, por lo demás, poco acostumbradas a pensar por sí mismas. El estado de partidos y su pseudodemocracia, pseudoelecciones, y pseudoconstitución, brilla más en estas mentes. La estrella errante o peregrina del estado de partidos y bancos al final, también ella, abandonará su sitio, pues sólo tiene una luz prestada. Ya vemos su peregrinar. Tan sólo la estrella fija de la libertad colectiva es inmutable, está fija en el firmamento y posee su propia luz. Es la misma independientemente de la perspectiva que tengamos de ella. No pertenece, como las otras, a un punto de vista – social o individual-, sino a la esencia humana. Mas todas las estrellas fijas, como la de la libertad colectiva, tienen una posición alta, y su luz necesita de años antes de ser visible a los habitantes de la Tierra. Esos años ya se han cumplido, su luz ilumina el amanecer de nuestros días.