Décima jornada para la marcha de la libertad. Hoy teníamos un problema grave por solucionar, y no podíamos continuar sin resolverlo, así que a las siete y media de la mañana hemos hecho una asamblea para tomar una decisión. Hemos tardado dos horas y media pero lo hemos solucionado. Hemos partido de Montesa a las diez en dirección a Moixent (la C en el mapa). Nos han acompañado las nubes durante todo el camino hasta que hemos llegado a las dos. Una señora nos ha recibido con una bolsa de ciruelas.   Hacía mucho calor. Nos han alojado en la escuela. Se celebran las fiestas patronales y el pueblo está de procesiones y tradiciones centenarias. A las siete de la tarde hemos comenzado la asamblea. A la gente le cuesta tomar la palabra. No hay manos que se lancen a tomar el altavoz.   Tercera etapa de la segunda fase, Moixent (C) Pero cuando hemos dado por concluida la asamblea y nos hemos mezclado en corrillos con la gente del pueblo entonces sí se consigue que se esfumen las timideces y los miedos. ¡Qué fastidiada está la gente! ¿Cómo pueden ser tan animales los que nos gobiernan? Todos quieren otra forma de vivir, pero tienen miedo. Y entre todos hemos de hacer que lo pierdan.