El nuevo presidente francés, Francois Hollande, prepara su entrada en el Palacio del Elíseo y quizás por ello está suavizando el programa con el que accedió a la Presidencia. Ya no habla con la rotundidad de antaño de una agenda de crecimiento, del mismo modo que Angela Merkel, sin dejar de insistir en la necesidad de austeridad, ha flexibilizado su fanatismo contra el déficit presupuestario. Ambos pretenden usar al Banco Europeo de Inversiones (BEI) para hacer compatible la austeridad con alguna alegría que estimule la demanda y el crecimiento.
En los informativos de Radio Libertad Constituyente, Trevijano afirmó que “Hollande todavía no se ha desdicho de su programa y que el pueblo francés tiene todavía esperanza de que su nuevo Presidente de la Republica pueda pueda cumplir lo fundamental de su programa de Gobierno, aunque ya esté hablando de austeridad. Compatibilizar déficit y crecimiento es la cuadratura del círculo, por lo que habrá que estar atentos a lo que pueda cede Hollande para entenderse con Merkel.