JESÚS MANUEL MORA PECCI.
Leon negro
Español, ser extraordinariamente desprendido de su propia vida, hombre que lo entrega todo y que omite dar explicaciones de sus actos porque éstos adquieren entidad universal per se, y el alma española deja al tiempo, a la historia y al semejante la interpretación de sus propias acciones, sean de relevancia histórica o meras anécdotas.
Quizás pueda resultar sutil la diferencia, pero en ella radica la trascendental definición de hombre y adicionalmente de hombre español.
Caballa fría
Mi marcha es más beneficiosa para España que mi permanencia en la presidencia, y yo no quiero que el sistema democrático de convivencia sea una vez más un paréntesis en la historia de España, buenas noches. Adolfo Suárez.
Podemos decir que más bien parece el estracto de una de esas novelas de corte Iberoamericano, extarordinariamente hortera, algo que engañaría a aquellos que se dejan engañar o que están interesados en difundir la corrupción y el enfrentamiento en el seno de la nación española por intereses personales o familiariares, algo que con dificultad confundiría al íbero, porque engañar al español es engañar a la humanidad y subsecuentemente generar una crisis de proporciones bíblicas.
Considero que elegante, caballeroso, educado y español es dimitir sin más, sin dar explicaciones y menos aún sobre sentimientos personales. Si usted verdaderamente cree que es lo que debe hacer, hágalo y váyase pero sin dar explicaciones y menos de configuración sentimental porque son contrarias al propio sentir español. Es decir, lo español es omitir decir lo que se siente cuando lo que se siente es un gran amor por España, es el sacrificio total, la entrega anónima.
Se puede comprender mejor si ponemos un ejemplo conocido por todos: El Juicio de Salomón. Durante el juicio, la madre natural, viendo que iban a acabar con la vida de su hijo, realiza la entrega total para salvarlo pero en ningún momento da explicaciones de porqué lo hace. La mujer ofrece a su hijo sin más. Se puede decir, siguiendo nuestro hilo narrativo, que la mujer tenía alma española. La verdadera madre, sólo dice: ─¡Ah, señor mío! Dad a ésta el niño vivo, y no lo matéis─.
Si es que he sido poco claro en lo que quería decir, que se interprete correctamente. Algunas cosas sobre España:
Los españoles son ejemplo que no parece excepción, pues siendo generalmente de estatura pequeña, la grandeza del corazón es tan grande que les da aliento, de forma que con su propio valor se han hecho dueños del mundo. Juan Pablo Mártir, 1626.
Los españoles son los mejores soldados existentes en la Cristiandad. Conde de Leicester.
Lo increible de España es que con una clase política tan inepta todavía exista el país. Bismarck.
España, evangelizadora de la mitad del orbe; España, martillo de herehes, luz de Trento, espada de Roma, cuna de San Ignacio, esa es nuestra grandeza y nuestra unidad… no tenemos otra. Marcelino Menéndez Pelayo.
El español que no ha estado en América no sabe qué es España. Federico García Lorca.
El general Franco se levantó para indicar que la reunión había terminado (…) (Me aseguró que) no habría una segunda guerra civil (…) Al irme me estrechó la mano y me dijo, casi en un susurro: “Mi verdadero monumento no será la cruz del Guadarrama. Mi verdadero monumento será lo que no encontré cuando me encargué del Gobierno de España, la clase media española (…) Fue la última vez que vi a Francisco Franco Bahamonde, Caudillo de España y Generalísimo de los Ejércitos. Según volvía a Madrid en coche me preguntaba cuántos estadistas serían capaces de discutir sobre su propia muerte de modo tan desapasionado como él. Su carácter no correspondía al del español excitable y garrulo imaginado por tantos noreuropeos y norteamericanos. Vernon Walters, embajador de EEUU.
Hay que elogiar la decisión española de mantenerse fuera de la guerra (…) Debo decir que yo considero que entonces España rindió un servicio, no solo al Reino Unido, al Imperio británico y a la Commonwealth, sino a la causa de las Naciones Unidas. Por ello no simpatizo con quienes creen inteligentes, e incluso gracioso, insultar y ofender al Gobierno de España en cualquier ocasión. Winston Churchill.
España fue devuelta a los españoles hacia 1976 (…) Nos hemos encontrado con que el pueblo español estaba vivo, activo, en disponibilidad: ni enfermo ni envilecido ni lleno de odio. Esto ha sido posible porque no ha faltado la levadura o, si se prefiere otra imagen, la sal de la tierra, que ha evitado la corrupción. Y esta sal histórica es una combinación de verdad y libertad. Julián Marías.
Ni hablar. Los españoles son el único pueblo mediterráneo verdaderamente valiente e inmediatamente organizarían guerrillas en nuestra retaguardia. No se puede entrar en España sin permiso de los españoles. Frase pronunciada por Hitler, luego de invadir Francia, cuando algunos generales le propusieron también invadir España.
Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla… Antonio Machado.
No estoy haciendo la guerra contra Franco para que nos retoñe en Barcelona un separatismo estúpido y pueblerino (…) No hay más que una nación: ¡España! (…) Antes de consentir campañas nacionalistas que nos lleven a desmembraciones que de ningún modo admito, cedería el paso a Franco sin otra condición que la que se desprendiese de alemanes e italianos. Manuel Azaña.