English versionYa tenemos fecha para la activación del Articulo 50 del Tratado de Lisboa, el día 29 de Marzo, así lo anuncio el 10 de Downing Street al Consejo de Europa, pero las fuentes europeas dejan claro que el Reino Unido puede ser forzado a esperar hasta Junio para empezar las negociaciones formales.
La decision de marcar una fecha exacta para el inicio de la cuenta atrás para la salida cuya duración es de 2 años, ha sido un golpe de iniciativa de la primera ministra, que ha querido mostrar solidez para encarar la salida de la UE.
Así pues, no se hizo esperar la respuesta del consejo, donde el polaco Donald Tusk, diciendo que el distribuiría el primer borrador de su respuesta a la carta de activación en las 48 horas posteriores a la presentación de dicha carta. Sin embargo, los destinatarios de este borrador, los líderes de los 27 dispondrán de cuatro a seis semanas para alcanzar el consenso necesario para arrancar las negociaciones.
Una terna de burócratas van a jugar un papel clave en las negociaciones por parte de la UE, estos son: Michel Barnier, el negociador de la Comisión Europea. Didiers Seeuws, el negociador del Brexit del Consejo Europeo y completa el trio el holandés Guy Verhofstadt, el negociador del Parlamento Europeo.
Así pues Gran Bretaña necesitara negociar los terminas de su salida de la Union Europea. Esto significa el final de cualquier pago que el Reino Unido tenga que hacer a Bruselas. Otro punto importante sera la negociación de los derechos de los ciudadanos comunitarios que residen en las islas y viceversa.
Al respecto de este punto hemos conocido este domino por una filtración en la prensa que en el programa del partido Tory se establecen garantías para que los tres millones de europeos mantengan las ayudas sociales por residir en territorio británico, lo cual va a suponer un alivio especialmente para nosotros los españoles que somos el colectivo mas numero de europeos expatriados en las islas.
Muchos de ellos participaban el pasado sábado 25 en la multitudinaria manifestación convocada por los partidarios de la UE. A los que alguna prensa llama Remoaners, una mezcla de Remain -quedarse- y Moaner -quejarse-. Así pues los asistentes a esta manifestación expresaban su queja por la decision del Brexit.
Entramos pues en la semana decisiva para la activación del articulo 50, días después de los fastos conmemorativos del 50 aniversario del Tratado de Roma, donde la ausencia del Reino Unido era “el elefante en la habitación” que Juncker no quería ver.
